La lucha por ser el rey del asfalto
Estamos ya finalizando nuestro repaso de lo que ha dado de si la primera mitad de temporada. Hoy vamos a hablar del Nacional de Asfalto, que esta misma semana vivirá una de sus pruebas más importantes de la temporada en el Rallye Principe de Asturias, prueba puntuable para el IRC. Estamos viendo una temporada de lo más interesante en la que, como ya ocurriese el año pasado, la lucha por la victoria se centra en los Súper 2000 y en los GT, bueno, en concreto, el Porsche de los hermanos Vallejo, ya que ni la armada Ferrari, ni ninguno de los Grupo N tradicionales ha podido seguir el ritmo de cabeza. A pesar de todo, nos estamos encontrando más de una sorpresa esta temporada, y nada nos invita a pensar que este vaya a ser el resultado final de la temporada.
El año comenzaba con muchas incógnitas que no tardaban en despejarse. Desde los primeros compases del Rallye La Vila Joiosa, prueba inaugural del Campeonato, los Peugeot 207 S2000 de Enrique García Ojeda y Luís Monzón comenzaban mandando con autoridad. Ojeda terminaba su rallye pronto, al tener que abandonar con problemas mecánicos, mientras que Monzón se afianzaba en lo más alto de la tabla. Pero, una vez más, la última especial de este rallye iba a ser decisiva. El piloto canario veía como un testigo le avisaba de que algo no marchaba bien en su motor, y aflojaba el ritmo, mientras que Miguel Fuster atacaba con todo, para lograr así una inesperada victoria, por delante del propio Monzón, y de un Sergio Vallejo que no se encontraba cómodo con su Porsche en estos tramos. Gran actuación de Oscar Garre, que en su debut como piloto oficial de Peugeot era cuarto, presionando a Vallejo, y Sergio Pérez lograba la quinta plaza final. Difícil comienzo para los Ferrari, que sufrían de lo lindo en los estrechos tramos alicantinos. Salidas de pista, penalizaciones, y algún que otro problema mecánico dejaban a Armide Martín como el Ferrari mejor clasificado en sexta posición, pero a más de 5 minutos del vencedor.
En Canarias, terreno favorable para los GT, Armide Martín y Sergio Vallejo luchaban a brazo partido por la primera plaza hasta la sexta especial, en la que Martín se salía, dando por terminado el rallye. A partir de entonces, Luís Monzón era el que pasaba al ataque, recortando distancias con los hermanos Vallejo, hasta quedarse al inicio de la segunda etapa a solo 10 segundos, pero el de Meira no estaba dispuesto a ceder en este rallye, en el que finalmente lograba la victoria, colocándose así como nuevo líder del Campeonato, gracias al alto coeficiente del rallye. Tercero en discordia era Enrique García Ojeda. Sin problemas mecánicos en esta ocasión, el campeón del IRC de la pasada temporada se aseguraba un buen botín de puntos con la tercera plaza, mientras que Oscar Garre hacía lo propio repitiendo en la cuarta plaza. La cruz de la moneda era para Miguel Fuster, que sufría una fuerte salida, diciendo adiós al rallye. Peor suerte corría aún Josep Basols, que también se salía de la pista, pero con tan mala suerte que su Ferrari 360 Modena empezaba a arder, quedando completamente inservible.
Entonces era cuando llegaba el momento de Enrique García Ojeda. El actual campeón en titulo del IRC no había tenido un buen inicio de temporada, pero en el rallye de casa, en Cantabria, iba a volver a brillar con luz propia, logrando una victoria incontestable. Pero iba a ser el único componente del equipo Peugeot que brillase en el rallye. De una parte, el segundo piloto oficial, Oscar Garre, iba a sufrir una fuerte salida de pista que dejaría su coche muy tocado. Por otro lado, Luís Monzón era pillado realizando entrenamientos ilegales. A pesar de alegar que en un principio no iba a correr esta prueba, y por ese motivo estaba entrenando, el piloto canario (junto a otros pilotos que también eran cazados) recibía una penalización de dos minutos que no iba a poder recuperar. Por su parte, Miguel Fuster se pasaba el día enzarzado en una bonita lucha con Garre, y con Sergio Vallejo. Finalmente el piloto alicantino se llevaba el gato al agua, tras la salida de Garre, beneficiado también por los problemas de Vallejo con su Porsche en una última especial en la que caía un buen chaparrón. Alberto Hevia se estrenaba esta temporada, logrando la victoria entre los Grupo N convencionales, y la cuarta plaza de la general, por delante de Pedro Burgo, y de Monzón, quien finalmente lograba superar in extremis tanto a David Hernando como a Armide Martín.
El Rallye Rías Baixas iba a ser la cuarta prueba de la temporada, y también una de las más emocionantes. Las tres primeras especiales eran una autentica locura, con tres lideres distintos en cada una de ellas. El primero era Luís Monzón, que cedía el puesto a Sergio Vallejo en la segunda especial, mientras que Enrique García Ojeda, que a punto estuvo de salirse en la primera especial, y decir adiós al rallye, se situaba líder en el tercer tramo. A partir de ahí, Ojeda no abandonaría la primera plaza, pero, eso si, siempre con los hermanos Vallejo a su estela, hasta la llegada de los tramos de la tarde, algo más revirados, y menos favorables al Porsche del equipo gallego. Ojeda lograba así su segunda victoria de la temporada, esta vez con Vallejo a su estela, y Luís Monzón en la tercera posición. Monzón debía apretar al final del rallye, puesto que Miguel Fuster venía muy fuerte desde atrás, pero no era capaz de superar al piloto canario. Sergio Pérez, que no había tenido demasiada suerte durante el resto de la temporada, alcanzaba aquí un meritorio quinto puesto, mientras que Armide Martín subía hasta la sexta plaza con el Ferrari.
Si en las pruebas anteriores Enrique García Ojeda era el que mandaba con cierta autoridad, el primer piloto de Peugeot iba a ver como la buena racha terminaba de golpe en Orense, donde su motor se paraba en el primer tramo, terminando ahí el rallye para el cantabro. Era entonces Luís Monzón el que comenzaba a tirar con fuerza, sabedor de que, en los tramos de la tarde, Vallejo iba a ser inalcanzable. Miguel Fuster trataba también de seguirle, pero si bien la distancia que lograba Monzón era insalvable, Sergio Vallejo rápidamente recortaba distancias con el piloto oficial de Fiat, que finalmente respondía a sus ataques, y lograba la segunda plaza. Buen rallye también para Armide Martín, que lograba el mejor resultado de la temporada para los coches del cabalino rampante, siendo cuarto, seguido de Pedro Burgo que, en esta ocasión, hacía valer su conocimiento del terreno y su gran experiencia sobre las manos de Alberto Hevia, que debía conformarse con la sexta plaza.
La última prueba de la ronda gallega, el Rallye de Ferrol iba a cerrar también la primera mitad de la temporada. La prueba coruñesa siempre ha sido dura, y el cambio de las especiales que se ha producido este año, no iban a cambiar este aspecto. Tras el fiasco de Orense, Enrique García Ojeda comenzaba de nuevo liderando la prueba. Una vez más, Sergio Vallejo salía a su estela, plantandole cara en las dos primeras especiales, pero el embrague del Porsche no aguantaba más allá del tercer tramo, debiendo abandonar. Todo apuntaba a un paseo triunfal de Ojeda, y así estaba siendo hasta que mediada la prueba su Peugeot 207 S2000 comenzaba a sufrir problemas eléctricos que le llevaban a abandonar. Luís Monzón, que hasta ese momento, y tras el abandono de Vallejo, se había dedicado a llevar su coche hasta la meta, heredaba así el primer puesto, que no abandonaría hasta el final, logrando así la victoria, y arrebatar la primera plaza del Campeonato a Vallejo. Pedro Burgo demostraba su gran conocimiento del terreno, y su buen hacer logrando una meritoria segunda plaza, de nuevo por delante de Alberto Hevia, mientras que Joan Vinyes se alzaba con la cuarta plaza, lo que nos puede dar una idea del gran número de abandonos que pudimos ver en Ferrol. Destacamos también en el apartado de abandonos el de Miguel Fuster, cuyo motor no pudo aguantar el ritmo, así como el de Oscar Garre, que por fin volvía a competir tras su accidente en Cantabria, pero se quedaba sin embrague, viéndose obligado a recoger antes de tiempo.
Esta ha sido la historia de la primera mitad de la temporada, que ha estado plagada de abandonos en los puestos altos de la tabla. Hay que recordar que a pesar de que este año encontramos una prueba más en el calendario, tan solo se retienen los 7 mejores resultados, como en otras temporadas, pero todos tienen ya algún resultado negativo en su casillero. El próximo rallye será este mismo fin de semana, que se disputará la que podríamos decir, es la prueba reina de la temporada, el Rallye Principe de Asturias, puntuable para el IRC, y donde veremos un importante cambio entre los pilotos que se encuentran luchando por el campeonato. Como ya hemos comentado, Sergio Vallejo disputará este rallye a los mandos de un Peugeot 207 S2000 del equipo Kronos, gracias al BF Goodrich Drivers Team, lo que podría dar la vuelta al certamen. Pero no será la única prueba que queda por delante. Tras el Principe de Asturias vendrá la otra prueba asturiana del Campeonato, Llanes, seguido del Rallye Sierra Morena, el Costa Brava, y, por último, el Rallye Shalymar, donde se cerrará esta edición 2008 del Campeonato de España de Rallies de Asfalto. Hasta el momento, la clasificación del Campeonato es la siguiente: Luís Monzón
| 75 puntos
| Sergio Vallejo
| 64.5 puntos
| Miguel Fuster
| 47 puntos
| Enrique García Ojeda
| 45 puntos
| Pedro Burgo | 30 puntos
| Alberto Hevia
| 27 puntos
| Joan Vinyes
| 24.5 puntos
| Armide Martín
| 22 puntos
| Oscar Garre
| 20 puntos
| Sergio Pérez
| 12 puntos
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Firma: Asfaltoytierra
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