Miguel Fuster lidera el nacional de asfalto en su ecuador

Como cada año, el parón estival del nacional de asfalto coincide con el ecuador de la temporada, y llega el momento de hacer un pequeño análisis de lo que ha pasado en las primeras cuatro pruebas de la temporada. Canarias, Cantabria, Rías Baixas, y Orense han sido los cuatro escenarios visitados por el campeonato estos meses. La clasificación del campeonato aparece encabezada por Miguel Fuster, que con dos victorias, es el único piloto del certamen que ha conseguido visitar lo más alto del podio en más de una ocasión. Pero el principal cambio que se avecina para la segunda parte de la temporada es la posible desaparición de uno de los animadores del inicio de la temporada, Luís Monzón.

Pero no nos adelantemos, y vamos a comenzar hablando de la situación actual del campeonato. Muchos la ven como una de las más ajustadas de las últimas temporadas, y, aunque los números dicen que si, si analizamos un poco más allá, las cosas pueden verse algo distintas. Es cierto que entre los cuatro primeros clasificados tan solo hay una diferencia de 22.5 puntos, algo que teniendo en cuenta que esta temporada solo se descuenta un resultado, es poca distancia. Un solo error puede dar al traste con esa diferencia. Pero lo que de verdad debemos mirar es ¿qué es lo que le ha dado a Miguel Fuster el liderato?

Como era previsible, los Porsche dominaban en Canarias. Miguel Fuster conseguía una importante, aunque previsible victoria. No tan previsible era el segundo puesto de Luís Monzón. El canario demostraba un gran nivel en los tramos de casa, superando al otro GT alemán, el de Sergio Vallejo. El invitado inesperado en esta prueba era Monzón, que a los mandos del Peugeot 207 S2000 de Delta Rallye lograba una meritoria segunda plaza, desarmando los argumentos de los que decían que los Porsche eran inalcanzables en los tramos isleños. Alberto Hevia no era capaz de seguir el ritmo, y además debía abandonar al sufrir un cortocircuito en su sistema eléctrico. Jonathan Pérez se encontraba así con una cuarta plaza en una prueba que no se le da excesivamente bien, mientras que Joan Vinyes lograba ser quinto. El resto de los Porsche estaban completamente desaparecidos. Daniel Marban no encontraba el ritmo y era octavo, e Iván Ares debía abandonar cuando iba cuarto, y mejorando sus cronos.

Cantabria iba a comenzar para todos con una sorpresa, y era la no participación en el último segundo de Miguel Fuster debido a un accidente mientras probaban los frenos antes de partir hacia Santander. Fuster estaba fuera, pero los deslizantes tramos cántabros, y la lluvia que caía sobre los tramos hacía que fuese un terreno poco propicio para los Porsche. De hecho la prueba la dominaba Luís Monzón con el 207 S2000 tras el pinchazo de Alberto Hevia en la primera especial. Pero la suerte era esquiva para el canario, y su motor se paraba en la asistencia del mediodía, lo que permitía a Hevia llevarse finalmente la victoria. La situación era propicia para los Súper 2000, y Jonathan Pérez conseguía la segunda posición, mientras que Joan Vinyes era tercero en un sorprendente resultado a los mandos del Suzuki Swift S1600, que le catapultaba a la primera posición del campeonato.

Hasta aquí todo iba más o menos como estaba previsto, con la excepción de que Vinyes era el líder del campeonato a pesar de la inferioridad mecánica. También todos estábamos pendientes de Luís Monzón, y su cambio de montura. El Rías Baixas iba a convertirse en una copa Porsche. Hasta cinco 911 GT3 se juntaban en el parque de salida. Luís Monzón se sumaba a Joan Carchat, que se estrenaba en esta prueba, al igual que Iván Ares, que retornaba al nacional tras recibir el revés de perder a uno de sus patrocinadores. Si miramos la prueba fijándonos solo en el resultado final, veríamos una bonita lucha entre Alberto Meira y Alberto Hevia por la victoria hasta la última especial, donde Meira echaba el resto, y aguantaba los envites del asturiano, restandole 5 puntos de cara a la general.

Pero ya en Vigo las cosas no terminaban de cuadrar. Si analizamos el resultado del Rías un poco más a fondo, encontramos que Sergio Vallejo se vio retrasado por dos pinchazos y Miguel Fuster por una penalización de un minuto tras adelantarse en un control. En la segunda etapa, con la lluvia acompañando a la caravana del rallye, los Porsche no se amedrentaban. Tanto Fuster como Vallejo marcaban unos cronos similares a los de los vencedores, manteniéndose en el ritmo incluso cuando la lluvia aparecía por sorpresa. De hecho, si quitamos la penalización de un minuto a Fuster, este habría sido tercero a solo 9 segundos del vencedor. El caso de Vallejo es algo más difícil de analizar, puesto que es complicado valorar cuanto tiempo perdió en sus pinchazos. Pero lo cierto es que lograba incluso marcar un scratch, y de no ser por los pinchazos, podría haber luchado también por el podio. En definitiva, a pesar de la lluvia, y de los tramos deslizantes, los Porsche seguían luchando por los puestos de cabeza, y sus rivales no sumaban todos los puntos posibles.

Si los resultados no terminaban de cuadrar en el Rías Baixas, menos aún cuadraban en Orense, donde a pesar de la lluvia, Miguel Fuster conseguía la victoria. Pero no lo hacía en solitario, puesto que Sergio Vallejo luchaba con el durante medio rallye, hasta que de nuevo un pinchazo se encontraba en el camino del piloto gallego, lo que dejaba en bandeja la victoria para Fuster. Además, el piloto alicantino iba a recibir una sorpresa, gracias a los puntos que restaban a sus rivales la aparición de Xevi Pons con el Ford Fiesta Proto, y la lucha que mantenía Víctor Senra con Alberto Hevia, que finalmente se decantaba del lado de Senra, con una nueva victoria de un R4+ sobre un S2000. De nuevo, los rivales de Fuster no sumaban todos los puntos posibles. Pons aparecía para junto a Senra apear a Hevia del podio, y poner en duda las posibilidades de luchar por el título de los S2000 con la actual reglamentación. Los Porsche ya ganan aunque llueva.

Quien se hundía en estas dos pruebas era Luís Monzón, que no terminaba de encontrarse cómodo con el Porsche en unos tramos poco adecuados para conocer las virtudes y defectos de un GT. La lluvia hacía que el canario dudase, y no pudiese conocer el 911 como necesitaba. Así pues, Monzón no pasaba de la quinta plaza en el Rías, gracias al abandono de Jonathan Pérez, y posteriormente debía abandonar en Orense con problemas en un palier tras tener un toque en el tramo anterior, donde la lluvia había complicado el agarre. La duda ahora está en saber si Monzón continuará en el nacional de asfalto, aunque todo parece indicar que no será así.

Tampoco iban bien las cosas para el actual subcampeón, Jonathan Pérez, que con dos abandonos en las pruebas gallegas se veía relegado a la sexta posición del nacional, perdiendo el tren de cabeza. Precisamente estos abandonos, junto a los altos costes de mantenimiento y reparaciones del Peugeot 207 S2000 han llevado al piloto asturiano a tomar un rumbo distinto para la segunda mitad de la temporada. Jonathan Pérez se encuentra ya conociendo el que será su coche para el resto de la temporada, y el próximo año, el Mitsubishi Lancer EVO X R4+ de RMC Motorsport, con el que espera mantener sus buenos resultados, y contener los costes.

Aún nos quedan por delante 5 pruebas. Ferrol, Príncipe de Asturias, Llanes, Sierra Morena y Madrid serán los escenarios que decidan quien será el Campeón de España de Rallies de Asfalto 2012, aunque está claro que hay un aspirante con cierta ventaja. Muy pronto haremos un análisis de lo que nos queda por delante en esta temporada del nacional de asfalto. De momento, os dejamos la clasificación actual de los 10 primeros del campeonato, con el número de ceros que tiene cada uno en su casillero. Recordad que esta temporada solo se puede descontar un resultado.

Firma: Asfaltoytierra