Rallye de Tierra doble Baja Andalucía (domingo)

La segunda prueba del fin de semana iba a determinar quien sería Campeón de la temporada 2011 de Rallies de Tierra. Óscar Fuertes lograba la victoria en la primera prueba del fin de semana, y sus opciones en la lucha por el título eran las mejores. Tan solo necesitaba ser cuarto, independientemente de lo que hiciesen sus rivales para vencer. El recorrido variaba por completo respecto a la jornada anterior, y la climatología se mantenía, aunque la falta de aire convertía el polvo en uno de los mayores protagonistas de la jornada.

Con una temperatura algo más fresca que en la jornada anterior, los equipos afrontaban la segunda prueba del Rallye Baja Andalucía con otro problema muy distinto, el polvo. La ausencia de aire hacía que incluso dando tres minutos de diferencia entre la salida de cada vehículo, el polvo que levantaban a su paso no se disipase, y resultase muy complicado el pilotaje. Por suerte, a mitad de la mañana, aparecía una ligera brisa que hacía que la situación cambiase completamente, y no fuera tan complicado afrontar los tramos.

Ayudado en parte por el polvo, Hayden Paddon comenzaba el día mandando con autoridad en las dos primeras especiales, en las que marcaba el mejor crono. Le seguía en ambos tramos Oscar Fuertes, que era el mejor de los pilotos del nacional, aunque ya a 47 segundos del neozelandés. Xavi Tanya y Ricardo Triviño eran tercero y cuarto, siguiendo escrupulosamente el orden de salida, lo que demostraba que el polvo que se iba acumulando con el paso de cada participante, iba complicando más y más la conducción. Tanya se quedaba a 43 segundos de Fuertes tras el primer bucle, con Triviño 31 segundos por detrás de el.

Tan solo quedaban dos tramos para finalizar el rallye y con él, el campeonato. Hayden Paddon volvía a marcar el ritmo en el tercer tramo, seguido por Ricardo Triviño y Xavi Tanya. Nos faltaba en la ecuación Oscar Fuertes, y es que, aunque el piloto madrileño no estaba tomando riesgos, sufría un pinchazo en su Lancer EVO X. Fuertes perdía un minuto en el lance, y con ello la segunda plaza, que ahora estaba en manos de Tanya, aunque por tan solo 14 segundos. Triviño también entraba en la pelea, quedándose a tan solo 3 segundos de Fuertes, por lo que todo quedaba pendiente del cuarto y último tramo.

Hayden Paddon mandaba también en la cuarta especial, logrando así una victoria perfecta, marcando el scratch en todos los tramos. Xavi Tanya era segundo en la especial, pero de nuevo los cronos no cuadraban. Resulta que Oscar Fuertes había dañado un latiguillo de los frenos en su pinchazo en el tramo anterior, y se quedaba sin frenos en este tramo, lo que le hacía perder 2 minutos. Hubiese sido tiempo más que suficiente para que Ricardo Triviño le superase, pero los problemas de rendimiento del Peugeot 206 WRC reaparecían, junto a un inoportuno pinchazo con el que perdía un total de 9 minutos.

Después de todo el lío, Hayden Paddon lograba la victoria, seguido a dos minutos y medio por Xavi Tanya. Oscar Fuertes era tercero a 4 minutos de Paddon, lo cual le proclamaba automáticamente como Campeón de España de Rallies de Tierra, ya que tan solo necesitaba ser cuarto entre los pilotos del nacional. La cuarta posición era para Carlos Aldecoa, que se quedaba a 4:38 del vencedor, mientras que quinto era Joan Font con el Mitsubishi Colt Proto, a 5:41, sexto Rubén Gracia a 5:46, y la séptima plaza era para Ricardo Triviño tras su pinchazo, a 9:20 de Paddon.

Dos ruedas motrices

En el apartado de dos ruedas motrices, Agustín Álvaro se tomaba las cosas con calma. Solo necesitaba alcanzar la meta para proclamarse campeón, algo que lograba a pesar de algunos problemas con la suspensión de su Citroen BX. Manuel Manzanilla comenzaba marcando el mejor crono, aunque pronto se vería retrasado por algunos problemas mecánicos. Rubén Sastre tomaba el relevo al frente de la general, luchando con el propio Manzanilla, que se reponía en la tercera especial. Pero la dureza del rallye iba a dejarse notar, y tanto Sastre como Manzanilla iban a retirarse en el último tramo, ambos por problemas mecánicos.

Por su parte, Rubén Fernández continuaba luchando por conseguir el campeonato de Grupo N con su pequeño Ford Fiesta ST, luchando contra Pedro Font y su Mitsubishi Lancer EVO IX. La pelea entre ambos nos permitía ver como Fernández se tiraba a por todas en el último tramo tratando de conseguir lo imposible. Finalmente no lo conseguía, pero desde luego el trabajo que hacía tanto Fernñandez como todo su equipo era realmente admirable. Quedaba a tan solo 36 segundos de Font, y aprovechaba los abandonos de Manzanilla y Sastre para conseguir la victoria en dos ruedas motrices.

Firma: Asfaltoytierra